En 2023, la SNCF lanzó una nueva licitación para renovar su flota de terminales móviles, tras constatar la robustez de los TREKKER-X4 en uso desde 2019. El objetivo principal era garantizar la continuidad de las operaciones para casi 24.000 empleados, cumpliendo al mismo tiempo unos requisitos mejorados en términos de seguridad, ergonomía y rendimiento técnico.